El 1 de Agosto del año 2002 África acogió con esperanza la firma de un acuerdo de paz entre Ruanda y Congo. El tratado, firmado en Pretoria (Sudáfrica), trató de poner fin a la llamada Segunda Guerra del Congo. El presidente de Ruanda, Paul Kagame, y el de la República Democrática de Congo, Joseph Kabila, se comprometieron a un alto el fuego inmediato bajo ciertas condiciones.
Ruanda se comprometió a retirar sus tropas del este de Congo a cambio de que el gobierno de Kabila persiguiese, desarmase y deportase a los integrantes de las milicias "interahamwe" (de mayoría hutu) a los que se responsabilizaba del genocidio tutsi de 1994. El acuerdo fue suscrito ante el presidente de Sudáfrica, una representante de la ONU y el presidente de la Comisión de la Unión Africana. El acuerdo definitivo de paz se firmaría también en Pretoria unos meses más tarde.
El conflicto entre ambos países provocó más de dos millones de muertos e implicó a seis Estados africanos